Opinar
de todo, y en cualquier circunstancia, no ayuda. Muchas veces
simplemente no tenemos nada que aportar.
Cuando
alguien nos contradice, o simplemente opina diferente, nos vemos en
la necesidad de reforzar nuestras primeras opiniones y entonces
adoptamos una posición, quedamos atrapados por estos comentarios que
ha veces hemos hecho simplemente para llenar un vacío en la
conversación, por decir algo.
Dificil
de entender esta necesidad de tomar partido en temas donde no
pintamos nada. Puede que sólo sea una manifestación extemporánea
de algo que llevamos dentro y que no sabemos como manifestar.